5 de septiembre de 2008

David Hasselhoff - Night Rocker

(Escribí esta reseña originalmente para El Portal del Metal)

¿Planeas montar una fiesta retro ochentera? Deja que te ayude. Necesitarás unas cuantas chicas desinhibidas, un montón de chicos beodos, ponche (mucho ponche), una piscina y algunas camisetas mojadas, chaquetas con hombreras imposibles, peinados cardados, unas bolas de espejos colgadas del techo, algún que otro asesino en serie acechando en el cobertizo… ¡y este disco en tu tocata!

Night Rocker (evidente alusión a Knight Rider) fue el primero de ¡14 discos! grabados por el caído en desgracia David Hasselhoff. Nuestro héroe se bajó del coche fantástico ese mismo año y, ante el desolador panorama que tenía ante él en su faceta como actor, y probablemente acuciado por los gastos, decidió colgarse una guitarra y grabar este disco.

David no tiene ningún pudor en regalarnos poesía a ritmo de rock-country. Perlas como…

I am the night rocker
I wanna rock you all night long
I am the night rocker
I wanna love you in a song

… os harán desear que el asesino en serie del que antes hablábamos se ponga en marcha y degüelle a su primera víctima (“Brian, ¿eres tú? Sal de ahí, Brian. No tiene gracia. ¿Brian? ¡BRIAN! ¡AAAAARGHHHH!”) para darle un poco de marcha a la velada. Y es que resulta complicado encontrar el ángulo por el que entrarle a este disco. Hay quien dice que en la simpleza está la belleza, pero todo tiene un límite. Si bien siempre hay que valorar el trabajo de una persona que intenta expresarse musicalmente, tampoco hay que perder la objetividad. Lo que es malo, es malo. Y esto, amigos, es rotundamente nefasto. Horteradas sensibleras como She Cried o No Words for Love, o chorradas felizonas como Do You Love Me (un estrafalario guiño a los fantásticos Rocky Sharpe & The Replays) o No Way to be in Love (con esos coros a lo Electric Light Orchestra pasados de vueltas) son ejemplos de un conjunto que a duras penas sirve para ambientar nuestra fiesta retro.

Hasselhoff intenta cantar aunque no tiene voz y a menudo se sale de tono. Intenta tocar la guitarra, aunque su labor es casi anecdótica, pues los músicos de estudio tras los teclados y el bajo suenan con mayor presencia, tal vez para enmascarar la torpeza a las seis cuerdas de su líder. Intenta escribir, pero, con un talento similar al de una patata de tamaño medio, sus letras resultan tan elementales que aburrirían a un fan de Mecano. Al final, pese a que alabemos sus buenas intenciones (¿ganar algo de dinero tras el final de El Coche Fantástico?), no podemos obviar que estamos ante un disco soberanamente malo y más tedioso que una película costumbrista iraní. Te tenemos cierto cariño, David, pero no abuses de él. Tanto, tanto, no te queremos.

A la Vuelta de la Esquina:
- 20 Años sin María Calas
- Cynthia Plaster Caster

28 de agosto de 2008

Herbert West, Reanimador

De Herbert West, que fue mi amigo en la universidad y posteriormente, no puedo hablar sino con extremo terror. Terror que no se debe completamente a la siniestra manera en la que desapareció recientemente, sino que fue engendrado por la naturaleza intrínseca de su trabajo en vida, y que adquirió por primera vez su posterior gravedad hará más de diecisiete años, cuando estábamos en el tercer curso de carrera en la Facultad de Medicina de la Universidad de Miskatonic, en Arkham. Mientras coincidió conmigo, lo prodigioso y diabólico de sus experimentos me mantuvieron totalmente fascinado, y me convertí en su más íntimo compañero. Ahora que ya no existe y el embrujo se ha roto, mi miedo es aún mayor. Los recuerdos y las posibilidades siempre resultan más terroríficos que la propia realidad.

El primer incidente espantoso durante nuestra amistad supuso la mayor impresión que jamás había experimentado hasta entonces, y me resulta muy difícil tenerlo que relatar. Como ya he anotado, sucedió mientras nos encontrábamos en la facultad de medicina, donde West había adquirido fama a causa de sus absurdas teorías sobre la naturaleza de la muerte y la posibilidad de vencerla con medios artificiales. Sus puntos de vista, que eran ampliamente ridiculizados por el profesorado y los compañeros de estudios, giraban en torno a la naturaleza esencialmente materialista de la vida, y a los procedimientos para influir en la maquinaria orgánica del ser humano mediante una calculada acción química que entraría en liza tras el fallo de los procesos naturales. Durante sus experimentos con varias criaturas vivientes había matado y ensayado con un número ingente de conejos, cobayas, gatos, perros y monos, llegando a convertirse en el personaje más molesto de la Facultad. En varias ocasiones había conseguido obtener signos de vida en animales supuestamente muertos –generalmente, violentos signos de vida-, pero pronto se dio cuenta de que la perfección de su método, de ser efectivamente posible, le requeriría sin género de dudas la dedicación de toda una vida a sus investigaciones. Del mismo modo, vio con total claridad que, puesto que una misma solución no actuaba de igual manera aplicada a distintas especies orgánicas, necesitaría ejemplares humanos para conseguir resultados futuros y progresos más especializados.

Tijeretazo de Herbert West, Reanimador
Relato incluido en Narrativa Completa, Vol. I
de H.P.Lovecrat
Editado por VALDEMAR GÓTICA

A la vuelta de la esquina:
- Soy Leyenda
- Watchmen

26 de agosto de 2008

AREA51: Ankh

(Escribí esta reseña originalmente para El Portal del Metal)

Con una notable y confesa influencia de Yngwie Malmsteen, Chris Impellitteri, Stratovarius o Dream Theater (y, esta la añado yo, de Dragonforce) llega desde Japón esta sensacional banda y su fantástico debut de 2005. Con apenas 37 minutos de extensión, este Ankh ha sido capaz de entusiasmarme como pocos discos lo han hecho recientemente. Con una fórmula mil veces escuchada, mezcla de virtuosismo y metal clásico, a la que añadimos un toque personal que, para bien o para mal, le confiere cierto sabor a dibujos animados japoneses, Area51 logran confeccionar un álbum refrescante y lleno de vigor.

Yoichiro Ishino, fantástico a las guitarras, y Takeshi Ochi tras unos teclados brillantes, llevan el peso instrumental de la banda con una precisión nipona llena de florituras de conservatorio. La sección rítmica, contundente y sincronizada, añade solidez al conjunto. Y la aniñada voz de la joven tokiota Kate les da ese toque manga tan particular como (para mí) encantador.

Alternando temas instrumentales y cantados, Ankh resulta un delicioso bocado que llega de tierras poco prolíficas en cuanto a metal se refiere. La incontestable calidad y la afable accesibilidad de sus temas lo convierten en un álbum del todo recomendable. He aquí el providencial “soplo de aire fresco” que tantas veces demandamos los metal heads. No os lo perdáis.

A la Vuelta de la Esquina:
- El placer de matar
- En la jaula de los leones

25 de agosto de 2008

Agrícola: Estrategias para una granja feliz

Una de las cosas que convierte Agrícola en un juego fascinante es su versatilidad. No hay una forma de ganar, pues el modo avanzado, con sus permutaciones de cartas de Oficio y Adquisición virtualmente infinitas, rediseña nuestra estrategia a cada nueva partida. Lo dicho: fascinante.

Peeeeero… algunas estrategias estándar sí podemos aplicar con cierto éxito. He aquí algunas sugerencias para los que os aproximéis a este excelente juego.

Una de las herramientas más útiles que el jugador de Agrícola tiene en sus manos es esta carta de ayuda.

El lado de las puntuaciones es especialmente interesante, pues nos ofrece dos datos importantísimos: qué necesitamos, y qué no necesitamos tener al final de la partida para puntuar con éxito.

Para empezar, deberíamos asegurarnos de no obtener puntos negativos. Observemos pues qué es lo que debemos evitar:

- Tener 0 o 1 solo campo.

- No tener ningún pasto, cereal, hortaliza, oveja, jabalí, vaca o parcela sin utilizar.

Cada una de estas carencias nos restará 1 preciado punto de Victoria. Es un hecho: mejor tener poco de todo que… mucho de poco (¡¿?!).

Además, la carta también nos da otras pistas. Hay ciertos recursos que otorgan un máximo de puntos, por más que tengamos muchos de tales recursos. Por lo tanto, debemos evitar tener excedentes que no nos van a puntuar. En lugar de eso, invirtamos nuestros esfuerzos en obtener recursos que sí nos puntuarán. Ahora os muestro la cantidad máxima que os conviene tener de cada recurso:

- 4 Hortalizas

- 4 Pastos

- 5 Campos

- 6 Vacas

- 7 Jabalíes

- 8 Ovejas

- 8 Cereales

Sólo interesa superar estas cifras si con el excedente pensamos alimentar a nuestra familia o si queremos cubrir parcelas vacías. La idea es que, después de alimentar a la familia en la última cosecha, no tengamos excedentes. Si los tenemos querrá decir que hemos invertido esfuerzo (y acciones) en obtener algo que no necesitamos. Por cierto: el orden en que he colocado estos recursos no es fortuito. Están ordenados por valor, de mayor a menor. Las hortalizas y pastos son los que más puntos otorgan (a razón de 1 punto por recurso), mientras que las ovejas y cereales son los menos valiosos. Observad también que al final de la partida no se obtienen puntos por madera, adobe, piedra o juncos. Así que no almacenéis un material que se va a convertir en humo.

Por supuesto, también podremos obtener Puntos de Victoria con nuestros establos (vallados), habitaciones reformadas y miembros de la familia. De hecho, estos tres frentes son muy valiosos (cada establo vallado nos da 1 punto, cada habitación de adobe 1, cada habitación de piedra 2 y cada familiar ¡3 puntos!), de modo que intentad encontrar el momento para invertir en ellos.

Otro factor importante es alimentar a la familia. Es muy recomendable obtener pronto una adquisición con la que cubrir esa necesidad. Los hornos son fantásticos, pero los hogares, cocinas o fogones son excelentes alternativas que además nos permiten cocinar hortalizas y animales, cosa que no podemos hacer con los hornos. No perdáis de vista esta estrategia: si cubrís las necesidades alimenticias de la familia podréis dedicar vuestros esfuerzos a hacer crecer la granja. Además, cuanto antes tengáis un modo de obtener alimento, antes podréis empezar a tener hijos. Si lográis tener hijos antes que el resto de jugadores ya estáis en el camino hacia la victoria.

Volviendo a la carta de ayuda, en el reverso tenemos una interesante información: las cartas de acción correspondientes a cada periodo. Usad esta carta con entusiasmo y podréis anticipar vuestras acciones. Prestad especial atención a las últimas rondas. Las 3 últimas acciones (Periodos 5 y 6) son buenísimas y muy codiciadas. Un modo de asegurarnos el acceso a esas acciones es obtener el puesto de Primer Jugador en las rondas finales.

Y por último, ya que hablamos del Primer Jugador, no olvidéis esto: en partidas de más de dos jugadores, ser el último jugador de la ronda suele significar ir siempre mal de recursos. Al ser el último en elegir acción, es más que probable que para cuando nos toque escoger ya no tengamos más que las migajas. Si ejecutáis la acción Primer Jugador podéis aprovechar para obtener una adquisición, así que es una opción muy aconsejable.

Confío en haber ayudado un poco a los que os aventuréis con este gran juego. Espero vuestros comentarios, objeciones y sugerencias.

A la Vuelta de la Esquina:
- Agrícola, Reseña Fotográfica

23 de agosto de 2008

De paseo

Os presento tres blogs que visito habitualmente. Picando sobre la imagen correspondiente podréis conocerlos.


Mundo Insólito es un hilarante noticiario sobre sucesos tan asombrosos como ciertos.


Freaki el Vikingo reúne un montón de juegos de mesa listos para descargar e imprimir.



La autora de Regina ExLibris nos narra las divertidas anécdotas que ocurren en su librería.