Maria Callas: para algunos una cantante sobrevalorada, para la mayoría, tal vez, la mejor soprano del siglo XX, no tanto por su técnica como por el provecho que supo sacarle a su voz imperfecta, y la emotividad con que interpretó a sus personajes. Su canto era un sueño, su energía y gracia en el escenario eran fascinantes, su belleza y elegancia eran perturbadoras.
Hoy brindo por María mientras su voz me emociona de nuevo. Y tras el brindis, abandono mis torpes palabras y dejo que sea ella, acompañada de Guiseppe di Stefano en un duelo de gigantes, quien ilumine el momento y nos recuerde que no, que la vieja Parca ha fallado esta vez, que María Callas aún vive porque su canto siempre vivirá.
3 comentarios:
Por cierto, para el vivo, escogí comprarme los cds de Butterfly de la Callas con Karajan en Milán. Apoteósica aria "con honor muore".
Pili
Seguro que es una gran versión. Y si te agradó M. Butterfly, deberías escuchar Tosca y Tourandot. Avísame si te interesan, y el viernes te las paso si vienes a la cena.
LA AMO
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