13 de octubre de 2007

Los Ladrones del Cielo

Hoy no tengo ganas de hacer crítica constructiva. Ante este engendro prefiero arremeter a patadas y que se encarguen otros de las opiniones sesudas. Me pregunto qué ha movido a la Editorial Planeta a publicar una bazofia de esta calaña. Los Ladrones del Cielo es una idiotez de 570 páginas en formato bolsillo. 570 páginas repletas de personajillos estúpidos, situaciones ridículas y propaganda católica trasnochada. Con un punto de partida poco prometedor, la cosa empeora a cada página que avanzamos. La historia comienza, tras un prólogo escasamente emocionante en que se relata un robo perpetrado por nuestro protagonista (un ladrón de guante blanco, ya ven ustedes), cuando un carismático multimillonario contrata a Michael St. Pierre para robar dos llaves de un museo vaticano. ¿Qué llaves son esas? Nada menos que las llaves que Cristo le dio a Pedro: las Llaves del Cielo.

Vale, como concepto pase. Un objeto de relevancia histórica y simbólica y bla, bla, bla… pero no, el autor de esta tontería decide que las llaves de marras son, a todos los efectos, las verdaderas Llaves del Cielo. ¿Y quién es el millonario contratista? El mismísimo Príncipe de las Tinieblas (¡toma ya!). Claro, cuando las llaves son robadas, ¿qué pasa? Pues que las puertas del cielo quedan cerradas y ya nadie puede entrar. Que la gente se muere y sus almas se quedan vagando en el purgatorio más perdidas que una vaca en un parking. Por un breve instante una lucecita de esperanza se ilumina en el corazón del pobre lector. ¿Se levantarán los muertos de sus tumbas? ¿Se poblará el mundo de muertos vivientes? Pero no. Richard Doetsch, el artífice de esta chorrada, es políticamente correcto, así que nada de zombies en esta historia.

Tras el robo de las joyas (tan sencillo como ridículo) las Llaves del Cielo están en poder del Diablo, y Michael, viendo su error y preocupado por la inminente muerte de su esposa (católica y apostólica recalcitrante, amén de enferma terminal) y la posibilidad de que esta no ascienda al Cielo, parte de nuevo en busca del tesoro. Ahora viene lo de engañar al demonio metiéndole en iglesias camufladas y dar el cambiazo de las llaves no una, ni dos, sino tres veces a lo largo de esta insufrible historia.

Las escenas de acción están a la altura del peor Chuck Norris y las escenas dramáticas a la altura del peor… Chuck Norris. Estamos ante un disparate colosal, una de esas novelas soberanamente malas en su trama y en su prosa que no tienen ni la decencia de servir de entretenimiento ligero. Una mamarrachada llena de sentimentalismo lacrimógeno propio de un telefilm cutre, de secuencias de acción soporíferas, de personajes con el carisma de una patata de tamaño medio y de una religiosidad mal llevada. Y de tal modo, no gustará a los aficionados al drama, ni a los amantes de la acción, ni al lector religioso con un ápice de inteligencia, ni a nadie con un mínimo sentido del gusto. Un engendro que va ir derecho a mi cubo de la basura.

A la Vuelta de la Esquina:

18 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Cómo demonios te lo pudiste acabar???recitabas mantras?era una promesa????una apuesta quizá?amor propio?
Dame la receta, que tengo un par así por casa...no hay manera con ellos y eso que yo tengo aguante.
Muy bueno el artículo, me he partido.
Pili

Evil Preacher dijo...

Jajaja; la culpa la tiene el Diablo por contratar a uno que se llama "Michael St. Pierre" para una misión así¡a quién se le ocurre! Yo, personalmente, hubiera preferido un Caín Botero o un Judas Mc Malo.

¡Menos mal está ahí el Vaticano para proteger las llaves del cielo! Así, todos podemos dormir tranquilos en la confianza de encontrar el Paraíso en sus sitio a nuestra muerte; bueno, todos, salvo el 86,30% no católico de la humanidad.

El Vengador Tóxico dijo...

Pili: ha sido cabezonería pura... y diez días de sufrimiento. Ayer me fui a París-Valencia para resarcirme, y me dije: "Puestos a leer algo malo, al menos que salgan zombies". Y me compré un par de novelas de Resident Evil.

Predicador: Pues no te he contado que el colegui que acompaña a St. Pierre en sus andanzas se llama Simon, y la esposa de aquel, Mary. Este Doetsch es un hacha.

Evil Preacher dijo...

No me sorprende: empecé mi último post diciendo que los símbolos hay que meterlos de manera que quede natural con la acción, este tío es el ejemplo perfecto de lo que no hay que hacer:
La acción de la novela es alegórica:
Michael St. Pierre es un símbolo del hombre moderno, que da la espalda a Dios, entregando al diablo su posibilidad de entrar en el Cielo. Naturalmente la llave de esa posibilidad la guarda la Iglesia Católica Romana, única verdadera. Sin embargo, Michael tiene todavía una posibilidad de redención en el amor.
El autor, preocupado por si no nos enteramos de lo que estaba contando (quizá despistados con las escenas de "acción" añadidas por razones comerciales, quizá en vistas de una adaptación cinematográfica a cargo de Mel Gibson) pone nombres para subrayar la alegoría: el protagonista, como cada hombre, es quien posee en sí la llave para entrar en el Paraiso (cada uno es su propio San Pedro) y la capacidad para distinguir entre lo bueno y lo malo (la labor de San Miguel).

El Vengador Tóxico dijo...

Vaya, por los detalles que aportas, veo que este autor tiene la sutileza de una apisonadora. De todos modos, como insinué, la adaptación al cine la veo más bien con el gran Chuck.

Ah, se me olvidó: Micheal también lleva otro amiguito que le ayuda: Paul. XDDDD Es curioso lo rápido que empiezo a olvidar los detalles de este librucho.

Hinoino dijo...

KOMO PUEDES DECIR TODO ESO!
es el mejor libro.. ¬¬ aparte de harry potter!

El Vengador Tóxico dijo...

Gracias por tu comentario, amiga Hinoino. Una opinión absolutamente respetable que difícilmente puedo compartir.

joseeeeeee dijo...

nose como poedis decir eso del libro pork es uno d elos mejores libros que me e leido

El Vengador Tóxico dijo...

Gracias por tu comentario, José. Traduciendo tu mensaje, entiendo que te ha gustado este libro. En ese caso, has tenido más suerte que yo. Enhorabuena.

victor dijo...

si es uno de los mejoreh libro q me e leido, pero vamos respeto totalmente tu critica

por cierto lo q si me parece cutre de richard doetsch es que en el libro pone q estaba trabajando en un nuevo libro y el titulo de este es el mismo q los ladrones del cielo pero los ladrones de angeles o algo asi no?? xDDD

El Vengador Tóxico dijo...

Gracias por tu comentario, Víctor. Evidentemente no coincidimos al valorar esta novela pero si tú has disfrutado con ella tanto mejor. Un saludo.

Hinoino dijo...

El libro que continua a este se llama los ladrones de la fe y tambien tiene los mismos protagonistas y todo, yo no me lo e leido, pero lo haré...

Un saludo!!

Maxi dijo...

Jajaja malisimo .. Pero creo que si no hay zombies en la historia a vos no te gusta :P

Anónimo dijo...

Que sabras tu de literatura, si eres un cazurro cateto. Los ladrones del cieli es una obra perfecta. Y no le confio las llaves a Pedro, parece q es el psicoanalista q te trata, q por cierto no es paque estes suerto jiji. Es San Pedro chaval. Espabila y aprende a disfrutar de los grandes escritores y dejas tus criticas para cuando te mires al espejo.

Fernando dijo...

Dedicado al "docto" crítico Anónimo...
Te ruego que antes de lanzar tales insultos, aprende algo de ortografía y expresión escrita.
Este país goza del derecho a la libertad de expresión, pero a veces, hay gente como tú que no se la merece.
P.

Yo dijo...

Muy buena (y graciosa) tu crítica!. Lo acabé ayer al libro y de verdad la única parte con suspenso del mismo es que hasta casi el final no sabemos con seguridad si el millonario es el diablo, literalmente, o no.

El Vengador Tóxico dijo...

Gracias, "Yo". Al fin alguien que no escribe en este post para amenazarme. :)

Anónimo dijo...

Yo me lo había empezado a leer y no me estaba gustando porque me había parecido observar que había cierta propaganda Pro iglesia... No estaba seguro si era paranoia mía, hasta que en el capítulo 9 me he encontrado perlitas como (y cito textualmente) "Aunque su fe era la más pura de la tierra, la jerarquía eclesiástica era consciente..." o "Se haría una manifestación a favor del aborto. Jóvenes estudiantes universitarios buscando protestar contra cualquier cosa hasta la hora del almuerzo." Se le ve mucho el plumero al Doestch, anda y que se vaya a cagar con el vaticano y la madre iglesia!!