18 de septiembre de 2008

Reseñas Fotográficas, Hoy Presentamos: RAILROAD TYCOON

Nuestra reseña fotográfica de hoy está dedicada a Railroad Tycoon, el juego de magnates del ferrocarril para 2 a 6 personas basado en el videojuego homónimo. Aunque Age of Steam está mejor considerado por su mecánica, los componentes de Railroad Tycoon son mucho más vistosos y el tablero es, dejando de lado algunos wargames, uno de los más grandes que podéis encontrar. Vamos a las fotos. Y recordad: clic para ampliar.


Empezamos por la caja. Grande (mucho) y pesada (mucho). Carece de departamentos, así que todos los componentes van de cualquier manera. Se hace imprescindible embolsar las piezas.




El manual, a todo color, a menudo ralla en lo incompresible. Me temo que Edge ha cuidado poco este aspecto.



El tablero es de un tamaño tan insensato que viene en tres enormes piezas. Estéticamente es un espectáculo (además, el dibujo del Este de los EEUU es bastante chulo), pero tiene un inconveniente: cuando un jugador necesita acceder a una zona alejada del tablero, o tiene un brazo telescópico como el inspector Gadget, o lo lleva crudo.





Aquí veis un par de sets de locomotoras de plástico. Hay 6 sets, en 6 colores. Cada jugador escoge un color y juega con él.


El jugador inicial de cada ronda tendrá a su lado esta flamante locomotora de madera.


No podían faltar los cubos de madera. Representan las mercancías (en abstracto) que transportaremos de unas ciudades a otras.



Estas son las piezas de vía que iremos colocando para enlazar ciudades.



Los marcadores de ciudad vacía. De plástico, pero bastante chulos. Y si los pintáis, más chulos todavía.


Fichas especiales para señalizar ciudades industrializadas y otros menesteres.


Dinerito. Sólo está impreso por un lado.


Emitir acciones puede ser tentador para conseguir liquidez, pero cuidado: ¡tus accionistas querrán cobrar sus dividendos!



Invertir en mejorar nuestras locomotoras es fundamental para obtener la victoria. Estas gruesas cartas indican la calidad de nuestras locomotoras.



Cada jugador “interpreta” a uno de estos magnates. Cada uno tiene sus propias ventajas.



Cartas de eventos. Están ahí para ayudarnos en nuestra empresa.



Y para terminar, algunas vistas de una partida improvisada.






9 comentarios:

Evil Preacher dijo...

Aunque ya hace bastantes post que está claro que has vuelto en serio y que el blog retoma su regularidad, es ahora cuando te doy la bienvenida y me congratulo por tu regreso: estas críticas de juegos son el núcleo duro del blog ¿volverán las siete cerraduras?

El Vengador Tóxico dijo...

¡Gracias, Preacher! Ha sido un parto natural. Casi me sorprende haber aumentado el ritmo, porque no ha sido una decisión consciente. ;)

Sobre las 7 cerraduras... precisamente tengo el tebeo sobre la mesa. Muy pronto, ¡Max Audaz volverá a nuestras pantallas!

¡Salud!

Taisensuikan dijo...

A este si que quiero jugar, y mucho!!

Anónimo dijo...

Hombre, yo este me lo machaqué en la versión de ordenador de Syd Meier. Tiene buena pinta con tablero, la verdad.

El Vengador Tóxico dijo...

Juan: no hay más que hablar, para la próxima este salta a la mesa, que aquí mandamos nosotros. Propuesta: tarde Railroad (requiere aprendizaje) y noche Agrícola (ya nos lo sabemos).

MeFuMo: Aún no he jugado al videojuego, pero me pongo a "solucionarlo" de inmediato. Tengo una burra que seguro que me ayuda.

Taisensuikan dijo...

No hay más que hablar!
Ahora solo falta que os quedeís en casa el puente de octubre...
jeje.

El Vengador Tóxico dijo...

Acá esteremos, chaval. Ve preparando el carbón pa las calderas.

Anónimo dijo...

Madre mia que tablero... a ver donde podría meterlo en mi casita de 40 metros...
Genial el reportaje fotográfico.

Un saludo

El Vengador Tóxico dijo...

Gracias, Jgonzal. Si te haces con el juego no olvides pasarte a comentarnos si te ha gustado.